He notado que cuando me invade alguna emoción, una o varias áreas de mi cuerpo se envuelven de una particular sensación . Por ejemplo, hoy por la mañana estaba un poco triste, no importa por qué – ya me pasó jeje. Mientras esa azul emoción abarcaba mi ser, traté de identificar en qué parte de mi cuerpo se posaba. Resulta que todo mi pecho y ciertas partes de mis brazos estaban plagados con esa sutil y aplacadora sustancia emocional. Hacé este ejercicio vos mismo. Si un día alguien te dice algo que te prende en furia, no te enfoqués en contestarle a ese prójimo con poco cerebro, mejor apartate y observá en qué parte de tu cuerpo está tu enojo. Estas son las partes donde yo siento algunas de mis emociones:

 

  • Calma: Todo el cuerpo
  • Cariño: Brazos
  • Celos: cráneo
  • Deseo: Hombros
  • Enojo: estómago y abdomen
  • Fastidio: Atrás de los brazos y espalda alta
  • Felicidad: espalda baja y mejillas
  • Humillación: hombros
  • Inquietud: Corazón
  • Miedo: intestino, brazos y cara
  • Rencor: Parte superior de mi pecho
  • Seguridad: Toda mi espalda
  • Sorpresa: Espalda alta
  • Valentía: manos y cuello

 

Puede que esto tenga algo que ver con química y fisiología; también puede ser que tenga algo que ver con el alma y espíritu. Qué importa, no quiero hablar de ciencia ni religión, ¿has notado en qué parte del cuerpo están tus emociones? Estar consciente sobre la presencia de tus emociones es de los primeros pasos para aprender a no ser controlado por ellas. Las mejores decisiones se toman al usar 50% corazón y 50% cerebro (restricciones aplican jeje).

Emoción. f. Alteración del ánimo intensa y pasajera, agradable o penosa, que va acompañada de cierta conmoción somática.

Comentarios